Cariñosos, sensibles, atentos y con una predisposición a hacer todo lo posible para complacer a sus dueños, el pastor suizo es una raza polivalente que disfruta mucho pasando largo tiempo con la familia y jugando con los niños. Son animales extremadamente obedientes asimilando con facilidad las normas que se le inculcan durante su educación.De apariencia lobuna y denso pelaje blanco, el pastor blanco suizo es uno de los perros más hermosos que existen.
En esencia, un perro de familia con la belleza de lo salvaje.